¿Porqué es tan difìcil elegir candidato?

Para estas elecciones me resulta muy difícil decidir por quien votar. Luego de pensar sobre el asunto me di cuenta de la razón: todos los candidatos son muy buenos. Si no me cree, analicemos las virtudes y defectos de cada uno. Los ordenaré, a riesgo de equivocarme, por orden de probabilidad de ser electos.

Mujica
Es la persona más popular del Uruguay, pero especialmente tiene credibilidad y seguidores en un sector de la población uruguaya pobre, ignorante y aparentemente cada vez más marginado. Sin embargo, Mujica tiene la enorme capacidad de integrarlos al sistema político dentro de un ideal democrático. Si no fuese por Mujica, tendríamos muchas dificultades con este sector de la población, que ha sido en otros países y momentos históricos la cantera donde los peores dictadores han buscado su apoyo y legitimación. La evolución de Mujica mismo ha sido notable, ya que como guerrillero tupamaro tuvo un extenso recorrido por el código penal, siendo culpable de sedición, atentado a la constitución, robo, secuestro y posiblemente asesinato. Restituida la democracia, nuestro parlamento tuvo la sensatez de amnistiar sus crímenes. Hoy es una voz de tolerancia y mesura, y posiblemente sea la persona con mayor capacidad de evitar la fractura de la sociedad uruguaya. Su visión económica es un tanto errática y a veces apoya proyectos esperpénticos como un nuevo frigorífico nacional. Pero por lo menos no se afilia a estructuras ideológicas como el comunismo totalitario. Tiene el coraje de decir desde la izquierda que muchos de los problemas de los uruguayos se solucionarían con un poco más de humildad y trabajo Como su principal virtud parece ser la de aprender tanto de los aciertos ajenos como de los errores propios apostaría que, como todos los presidentes anteriores, de ser electo tendría aciertos y errores en su política económica y los aciertos tal vez no sean espectaculares, pero sus errores posiblemente los corrija antes de transformarlos en catástrofes.. La mayor crítica que se le hace es que no usa corbata.

Lacalle.
Tiene una visión de estadista y posiblemente el mejor equipo de gobierno, con jóvenes entusiastas y con una excelente formación. Su gobierno impulsó ambiciosas reformas económicas y si se le da una nueva oportunidad es posible que pueda llevar al país por una senda de crecimiento, modernización e innovación. Sin embargo, para muchos su principal virtud es que usa corbata. Su anterior gobierno convivió con numerosos casos de corrupción que llegaron a su entorno más íntimo. En su momento, se mostró indeciso, vacilante e incapaz de hacerle frente al problema. Es posible que haya aprendido de esos lamentables episodios. Confío también que la oposición, particularmente la izquierda haya aprendido que no todo derechista es corrupto, ni todo izquierdista un santo, y por lo tanto sea capaz de controlar más eficazmente al ejecutivo.

Larrañaga
Parece ver como su misión la de integrar la izquierda con la derecha, el campo con la ciudad, los jóvenes y los viejos. No es un pensador profundo (lo que es malo) y tiene fácil llegada con todo el mundo (lo que es bueno). Para los que les preocupa la corbata, Larrañaga a veces la usa y a veces no. Tal vez no entusiasme por su falta de propuestas y de definición ideológica, pero su gobierno haría un gran esfuerzo de entendimiento entre todos los sectores. Y en política muchas veces es preferible un solución buena y consensuada a una excelente que no logra el suficiente apoyo.


Astori
Representa en el Uruguay las ideas de la social democracia europea. Esta posición política ha sido la mayoritaria en Europa luego de la segunda guerra mundial, y logró un desarrollo económico sostenido, una razonable distribución de la riqueza y un estado de bienestar que garantiza vivienda, servicios médicos y educación a casi toda la población. Se le puede criticar un cierto amortiguamiento de la creatividad y la innovación, y dificultades para la integración social de minorías étnicas. Astori, que por usar corbata tiene ciertas dificultades para ser aceptado por la izquierda más tradicional, ha demostrado capacidad de gestión y un rumbo claro para la modernización de la izquierda y la conducción del país hacia el crecimiento económico basado en criterios racionales.

Bordaberry
Estrictamente no tiene ninguna chance de alcanzar la presidencia, y por lo tanto no le correspondería estar en esta lista, pero si el lector desea votar al Partido Colorado, es un excelente candidato. Primero, es el que mejor ha resuelto el tema de las corbatas, ya que no la usa, pero es como si la usara. Cada una ve la corbata o no la ve, según sus preferencias corbateras. Ha sufrido las consecuencias del golpe de Estado y la dictadura, desde otra trinchera que la mayoría de los uruguayos, por eso su experiencia es diferente pero no menos valiosa. Su sufrimiento es presente, ya que tiene a su padre preso, por el crimen de atentado a la Constitución, de lo que es culpable, y por las muertes de Michelini y Gutiérrez Ruiz, de las que es inocente, tal como lo aceptó el hijo de Michelini y lo sospechó el hijo mayor de Gutiérrez Ruiz. Esta experiencia vital lo ha hecho madurar y tiene una propuesta de conciliación que parece sincera. Tener una voz en el parlamento que defienda posiciones no de izquierda (no quiero decir de derecha) le hará bien al país.